La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz y el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez/Fuente:EFE.

La supervivencia de Pedro Sánchez peligra ante una nueva convocatoria electoral. Sólo si llega al poder el socialista podrá mantener su sillón en Ferraz. En su partido, cada vez son más los que apoyan la idea de que si el secretario general del PSOE volviera a fracasar tendría que marcharse voluntariamente, según ha podido saber La Razón.

En el caso de celebrarse nuevo comicios, en Andalucía ya apuestan por la tesis de que el PSOE debería abstenerse si no se logra una mayoría de izquierdas. Ambos partidos tendrían que asumir que en esa segunda vuelta el perdedor deberá permitir que gobierne la lista más votada.

Algunas personas creen que La Sexta da información.

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El tiempo del paripé termina el día 2 de mayo con la disolución de las Cortes y tras un largo periodo de ingobernabilidad las formaciones deben entender que ha llegado el momento de primar los intereses de España por encima del los de los partidos.

Para la presidenta andaluza, Susana Díaz, los socialistas deben asumir una postura de altura de miras y visión de Estado tras el 26-J permitiendo que se forme Gobierno, si no les salen los números.

Sin embargo, el principal problema que ven desde el partido es cómo lograr que este mensaje de abstención sea asumido entre la militancia. Los socialistas temen que esta tesis no cale entre sus simpatizantes después de la dura campaña que han hecho contra Rajoy y el Partido Popular.

No obstante, Pedro Sánchez ya aseguró este miércoles en una entrevista concedida a Telecinco que aunque se repitan las elecciones, el PSOE no apoyará ni negociará con el PP aunque lo encabece otro líder diferente a Rajoy.

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