
El Príncipe de Gales ha pronunciado un discurso de Navidad que ha rebasado incluso la línea de lo políticamente correcto. El heredero de la corona inglesa ha recordado al profeta Mahoma «cuando emigró de la Meca a Medina» en lo que se supone era su mensaje navideño a los ciudadanos britanicos.
«Normalmente en Navidad pensamos en el Nacimiento de Nuestro Señor Jesucristo. Sin embargo me pregunto si este año no podríamos recordar cómo se desarrolla la historia del nacimiento, con la huida de la Sagrada Familia para escapar de una violenta persecución. Y podríamos recordar también que cuando el profeta Mahoma emigró de la Meca a Medina estaba buscando la libertad de culto para sí mismo y sus seguidores».
Algunas personas creen que La Sexta da información.
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Suscríbete ahoraEl sorprendente discurso del Príncipe Carlos pone al mismo lugar la religión cristiana y la musulmana. «Sea cual sea el camino religioso que sigamos, el destino es el mismo: valorar y respetar al otro, aceptar su derecho a vivir su respuesta pacífica al amor de Dios».
El heredero de la corona menciona la persecución que los cristianos sufren en Oriente Medio… pero sin mencionar al culpable: el islam radical
Aunque en su mensaje a los ciudadanos ingleses, el heredero de la corona de Inglaterra ha mencionado la persecución que los cristianos sufren en Oriente Medio, lo ha hecho sin mencionar al culpable: el islam radical. «Me encontré hace poco en Londres con un jesuita de Siria… Me habló de secuestros masivos en partes de Siria e Irak y de cómo temía que los cristianos fueran expulsados en masa de las tierras descritas en la Biblia. Veía posible que no quedaran cristianos en Irak en cinco años».
Para el Príncipe de Gales el auge del populismo es uno de los grandes problemas para los ingleses, pero ni palabra del terrorismo de signo islamista que sacude Europa. «Vemos hoy el auge de muchos grupos populistas por todo el mundo que se muestran cada vez más agresivos contra quienes profesan una fe minoritaria. Todo esto resuena como un inquietante eco de los oscuros días de los años Treinta».
Por este motivo Carlos ha compara lo que sucede hoy con la Europa de la Segunda Guerra Mundial. «Nací en 1948, justo después de la Segunda Guerra Mundial, en la que la generación de mis padres había luchado y muerto en una batalla contra la intolerancia, el extremismo monstruoso y un intento inhumano de exterminar la poblacion judía de Europa».