Europa Press
El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, ha asegurado que no concibe la política como una forma de vida sino como una responsabilidad en la que espera estar solo «un tiempito» que, aunque no ha concretado, no iría más allá de dos legislaturas, según declaró a Antena 3.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
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Suscríbete ahora«No me imagino dentro de ocho años diciendo: venga va ‘otras elecciones más'», indicó el líder de la formación morada, que ha matizado que «ojalá» ni dos legislaturas.
En estas declaraciones, recogidas por Europa Press, Iglesias subrayó que la política para él es una responsabilidad, «no un plan de vida» y cargó contra esos políticos que se relacionan con ella como «cocainómanos».
«La manera en que se hacen viejos», dijo el líder de Podemos, que puso el ejemplo de los expresidentes Felipe González, «una sombra siniestra de lo que representó para este país», o José María Aznar y su «necesidad de salir aunque ponga en riesgo a su propio partido». «Son como drogadictos que necesitan tener esa presencia pública», ha apostillado.
Presencia en el Congreso
En cambio, en su caso personal remarcó que no existe esa ambición: «En el momento en que políticamente entendamos que debo dar un paso al lado, seré muy feliz», explicó. Sobre su presencia en el Congreso de los Diputados, el líder de Podemos confesó que cuando se imagina en la Cámara Baja a veces se siente como el personaje del suicida en la película Amanece que no es poco de José Luis Cuerda, que siempre quería cambiar de papel.
«Esta mañana estaba viéndolo -la sesión de control en el Congreso- y era como hostia puta, me voy a tener que pasar la vida ahí y era como una sensación de buffff«, ejemplificó Iglesias, que confesó no entender «qué les pone» a políticos que llevan 30 años en política y todavía no piensan en seguir.
En cualquier caso, dejó claro que «es importante» que Podemos esté representado en el Congreso y se dejará la piel y se esforzará para lograrlo. «Esto está lleno de sacrificios, es muy difícil, supone vivir en una situación de tensión», explicó, pero sigue por la «gente que está detrás empujándonos y diciéndonos aguantad aunque os den duro»
«Sin eso me voy a mi casa y tengo que estar en el Congreso estaré un tiempo, un tiempito, y después volveré a recuperar las cosas que me hacen feliz», concluyó el candidato a La Moncloa.
