“Se nos coló”. Así es como se manifestaron los mossos d’esquadra cuando les preguntaron por qué no habían detenido a Puigdemont al cruzar la frontera. El huido de la Justicia se permitió dar un discurso ante su público. También se les escapó. Tras el ridículo, la policía autonómica dice que ha puesto en marcha la ‘operación jaula’. ¿Quién es el pájaro?
No es retórica. Es pregunta. Porque es obvia la deslealtad de Puigdemont y su presunta criminalidad. Pero la deslealtad de la Generalitat, ¿cómo cabe calificarla?
Algunas personas creen que La Sexta da información.
Suscríbete a Actuall y así no caerás nunca en la tentación.
Suscríbete ahoraSi la policía autonómica no es capaz de detener a un prófugo de la Justicia perfectamente reconocible, es mejor que se disuelva. Y si es tan desleal como para permitir desobedecer la orden judicial de detención, entonces es imperativa la intervención de la autonomía.
El problema es que la deslealtad de unos y otros cuenta con el beneplácito del irresponsable de la Moncloa, que no sólo le ha resucitado sino que ha negociado con él dónde él ha querido, cuándo él ha querido y lo que él ha querido.
Por eso el ‘performance’ de este jueves es más teatro que fallo policial. Con el agravante del insulto a la inteligencia. ‘Nos mean y dicen que llueve’…
No es Puigdemont quien se ríe de los españoles; es Sánchez quien se ríe de las instituciones.
El ‘plan B’ del prófugo es invocar el ‘habeas corpus’ por supuesta detención ilegal. Y que el Constitucional resuelva. Y el Constitucional ya sabemos lo que resolverá. Lava mas blanco…