
La campaña para las elecciones autonómicas está condicionada, no sólo por la situación sanitaria y los intentos interesados del gobierno nacionalista por retrasar los comicios, sino también por la violencia que diferentes grupos radicales nacionalistas catalanaes están desplegando en cada acto electoral convocado por Vox.
A lolargo del fin de semana se han sucedido los amedrantamientos, los lanzamientos de frutas, verduras, piedras, petardos y piezas de tornillería contra los candidatos y dirigentes de Vox, así como contra sus simpatizantes.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
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Suscríbete ahoraEn localidades como Vic o Salt los ataques contra Vox -que han sido calificados por la formación como realizados por «terroristas callejeros»- producen al fin que «no hay libertad política en Cataluña», tal y como ha denunciado Ignacio Garriga, candidato a la presidencia de la Generalidad.
«Esta violencia es el resultado de un señalamiento constante, desde las tribunas y los medios de comunicación. Unos señalan, los otros ejecutan. Y los resultados son estos.
Abandonen toda esperanza. No nos vamos a ir. No nos van a echar de nuestra tierra.
Nos vamos a quedar y desde el Parlament lucharemos para acabar con la mafia separatista. Vamos a recuperar Cataluña y a devolverla a la mayoría de los catalanes”, ha señalado Garriga.
Por su parte, el presidente de Vox Santiago Abascal, presente en Salt (Gerona) este domingo, ha denunciado la pasividad de los responsables de los dispositivos de seguridad de los actos públicos.
Durante su intervención, el presidente denunció la “inacción del dispositivo”, pese a que los violentos tiraran piedras. Así, Abascal ha acusado directamente a la Consejería de Interior del Gobierno de Generalidad y al Gobierno de España de ser “cómplices” de estos ataques, pese a los 20 minutos de lanzamientos. También se ha referido durante su discurso al jefe del dispositivo de los Mossos, quien “obedece las órdenes de partidos golpistas”.
Mientras estos ataques e producían, Esquerra Republicana de Cataluña realizaba sin problemas sus actos electorales en los que participaron el condenado Oriol Junqueras y el terrorista Arnaldo Otegi.