«Preocupación por la falta de una respuesta proporcional, y por tanto, contundente, ante el desafío separatista». Este es el mensaje que el líder de VOX, Santiago Abascal, hubiese trasladado al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, si le hubiese recibido en La Moncloa al igual que al resto de líderes políticos.
El presidente de la formación, envió la semana pasada una carta a Rajoy, en la que solicitaba ser recibido por su condición de partido nacional defensor de la unidad de España.
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Suscríbete ahoraEn ese encuentro, a Abascal le hubiese gustado trasladar al Ejecutivo «su absoluta lealtad si aplica la ley con todo el rigor y celeridad para garantizar la continuidad histórica de España y la legalidad constitucional».
Además, el líder de Vox hubiese pedido al Gobierno la aplicación de tres medidas claras contra el desafío independentista: la suspensión de la autonomía de Cataluña, la detención y procesamiento de los sublevados, y por último, la disolución de organizaciones ilícitas como Convergencia, CUP y ERC.
«En caso de que el Ejecutivo renuncie a cumplir y hacer cumplir la Constitución, lamentamos expresar nuestra voluntad de acudir a los tribunales y denunciar al Gobierno por dejación de funciones», ha sentenciado Abascal, que ha concluido su intervención con un mensaje claro: «La unidad de España ni se vota, ni se negocia, ni se suplica. Se defiende. Con la ley, pero con toda la ley, por tierra, mar y aire».
