El Instituto Valenciano de las Mujeres, dependiente de la Consejería de Igualdad y Políticas Inclusivas del gobierno valenciano que dirige Mónica Oltra, quiere obligar a Playmobil a reescribir la Historia.

Impulsados por la denuncia de dos particulares enviaran sendas denuncias al Observatorio de la Publicidad no Sexista de la Comunidad Valenciana contra una colección sobre personajes históricos realizada conjuntamente por Playmobil y Planeta de Agostini titulada «La aventura de la historia«.

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Se trata de una colección por fascículos dirigida al público infantil, lanzada a finales del mes de agosto, que prevé abordar diferentes personajes y periodos de la historia como la Edad Media, la Civilización Egipcia, la conquista espacial o la Prehistoria.

Figuras de la colección histórica infantil de Planeta de Agostini elaboradas por Playmobil /Planeta de Agostini
Figuras de la colección histórica infantil de Planeta de Agostini elaboradas por Playmobil /Planeta de Agostini

Cada una de las 60 entregas previstas consta de un libro explicativo, dos fichas resumen y una figura genérica de Playmobil relativa a los periodos históricos tratados.

Al parecer, la denuncia critica el hecho de que entre los muñecos esté previsto un guerrero medieval, pero no una princesa; un cazador prehistórico y no una recolectora; un jefe Siux y no una mujer india; etcétera.

Según publica ABC, la directora del Instituto Valenciano de las Mujeres, María Such considera que en la colección educativa de Planeta de Agostini se viola «el principio de igualdad de oportunidades» y se produce discriminación contra la mujer porque «no aparece representada ninguna mujer» destacada a lo largo de la Historia.

Para Such, la colección lanza «un mensaje de cultura dominante patriarcal a la poblacion más jóven» y supone «una apropiación de los logros de las mujeres por parte de los hombres».

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Nicolás de Cárdenas fue inoculado por el virus del periodismo de día, en el colegio, donde cada mañana leía en su puerta que “la verdad os hará libres”. Y de noche, devorando los tebeos de Tintín. Ha arribado en su periplo profesional a puertos periodísticos de papel, internet, televisión así como a asociaciones cívicas. Aspira a morir diciendo: "He combatido bien mi combate, he corrido hasta la meta, he mantenido la fe".