Christian Rosas, fundador de #ConMisHijosNoteMetas: «Combatimos la imposición de la mentira»

    Christian Rosas, fundador del movimiento #ConMisHijosNoteMetas en la América hispana explica a Actuall por qué rebelarse ante la ideología de género. "La defensa frente a cualquier imposición inicia con la decisión de resistirse a la mentira y al compromiso de no ser cómplice".

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    Christian Rosas, fundador del movimiento #ConMisHijosNoTeMetas contra la imposición de la ideología de género.

    A punto de cumplir la treintena, el fundador del movimiento #ConmisHijosNoteMetas, Christian Rosas (Lima, Perú, 1989) se ha convertido en una de las voces más importantes frente a la imposición de la ideología de género en el mundo hispánico.

    Formado en Relaciones Internacionales en la Liberty University (Virginia, EE.UU.) y la Pontificia Universidad Católica del Perú, compatibiliza su profesión de asesor político independiente con el liderazgo del movimiento y su familia. En el momento de hacer esta entrevista, Rosas espera junto a su mujer y su hija Victoria de cuatro años el próximo nacimiento de su segundo hijo, un varón que llevará por nombre David Felipe.

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    Su objetivo, erradicar la ideología de género.

    ¿Cómo surge la plataforma #ConMisHijosNoTeMetas? 

    El colectivo nace como reacción de un grupo de ciudadanos cansados y hartos de la imposición y avance sin contención notoria de la mentira en el Estado, principalmente en el plano educativo a través del mal llamado enfoque de género, léase ideología de género.

    Ante el deterioro moral de la política y la mayoría de sus actores que observan pasiva y cobardemente la implementación de la mentira nos hemos resuelto a formular una respuesta social de impacto político y alcance global, buscando trascender las barreras del idioma y las fronteras territoriales, motivados por la convicción profunda de que ninguna mentira es eterna y que la ley debe fundamentarse en la verdad para que sea justa.

    ¿En qué países está implantada en América?

    El colectivo #ConMisHIjosNoTeMetas tiene presencia en todo el hemisferio americano con excepción de Venezuela.

    Las manifestaciones de #ConMisHIjosNoTeMetas en  la América hispana fueron impresionantes. ¿Cómo lograron alcanzar ese éxito popular?

    La opinión pública en el mundo usualmente rechaza la imposición de ideologías que desconozcan sus libertades y derechos humanos, pero lamentablemente la opinión publicada de los grupo mediáticos se arrogan la vocería de toda la población, suprimiendo así de forma consciente y astuta la verdad sobre el pensamiento popular frente a la mentira.

    No obstante, cuando un grupo de ciudadanos se levantan erguidos sin temor alguno ante la mentira orquestada globalmente, es solo cuestión de tiempo que la conciencia humana despierte del letargo y haga audible su protesta con presencia física y determinación inquebrantable, como ya ha venido sucediendo en el hemisferio americano y está repercutiendo en el Viejo Mundo.

    ¿Cuáles son los peligros que quieren combatir como padres? 

    El peligro que nosotros combatimos es la imposición de la mentira en nuestros hijos, la experimentación de ideologías anti natura y anti científicas en las mentes y posteriormente los cuerpos (hormonización, mutilación y falsas identidades) de nuestros hijos e hijas. La pretensión de romper su inocencia forzándoles astuta y sigilosamente a ser tolerantes con la mentira. Cuando una ideología se pretende implantar  por medio del monopolio del poder estatal entonces genera un despertar de conciencia aguda que permite organizarnos de forma rápida, natural y transversal.

    «Preferimos ser fieles a la voz de nuestra conciencia que a los dictados estatales»

    El peligro de no hacerlo implicaría perder nuestros derechos y libertades para sacrificar la libertad e inocencia de nuestros hijos ante el altar de ideologías. Amamos a nuestros hijos, no queremos que se conviertan en hijos del estado como añoraban los sistemas totalitarios del siglo pasado y el presente.

    ¿Qué efectos tiene sobre los hijos?

    Como ya se ha mencionado, la mentira tiene consecuencias concretas; como la manipulación del cuerpo de los niños y niñas para experimentar con ellos ideas falsas cuyas consecuencias muchas veces son irreversibles. Mirar al otro lado y guardar silencio implicaría una complicidad tácita y consciente, por eso nos hemos resueltos a no callar de lo que hemos visto ni tampoco de lo que hemos oído, preferimos ser fieles a la voz de nuestra conciencia que a los dictados estatales de quienes se asumen soberanos y nos consideran súbditos.

    Se trata de una lucha global. ¿Qué papel desempeñan la ONU, la OEA la UE y otras organizaciones internacionales?

    Estos organismos en vez de servir a los ciudadanos, defendiendo sus derechos del abuso estatal, paulatinamente han tomado partida por el lado opresor, pretendiendo intimidar a los ciudadanos a través del financiamiento transnacional de la mentira a ONGs que responden a dictados ideológicas que se imponen de arriba hacia abajo y buscan destruir la democracia que se desarrolla de abajo hacia arriba.

    «Las sociedades más antagónicas a la moral, que han adoptado una visión relativa acerca de esta y la humanidad, han sucumbido en el subdesarrollo moral»

    Hemos venido participando en diferentes instituciones internacionales para expresar nuestra voz de protesta ante los abusos que los gobiernos perpetúan contra los padres de familia y en contra de la inocencia de los niños. Este activismo nos ha generado una serie de acusaciones infundadas que pretende desfigurar un reclamo sencillo y universal que resume en la exclamación: #ConMisHijosNoTeMetas

    ¿Se trata sólo de que se respete la Biología o va más allá?

    La biología solo puede ser respetada si uno reconoce la moral como un bien común en la humanidad. En otras palabras, solo las personas con honestidad intelectual podrían respetar la realidad, pero quienes lo rechazan, lo intentan modificar, y exaltan el engaño mediante ideologías implementadas mediante programas estatales no podrán respetar nunca la verdad, ni la realidad, ni la libertad que nos es inherente a cada persona de la familia humana por diseño u orden natural.

    ¿Cómo defenderse de la imposición de la ideología de género?

    La defensa que uno pueda ejercer frente a cualquier imposición inicia con la decisión de resistirse a la mentira y al compromiso de no ser cómplice de ésta mediante la apatía, indiferencia o el silencio. Por ejemplo, el primer paso de quienes desean luchar en defensa de la verdad consistirá en romper la inercia expresando su disidencia pública y privada del nuevo dogma estatal que aparece mediante la introducción de términos ideológicos como el “género”, iniciando el activismo mediante los instrumentos que se cuentan a la mano, como las redes sociales y las notas virtuales.

    ¿Por qué llega hoy a España? ¿Es un caso único en Europa?

    Cada sociedad que descarta la verdad y la moral, dejándose intimidar por la retórica de sus opositores, terminan por derribarse completamente. Por esta razón, las sociedades más antagónicas a la moral, que han adoptado una visión relativa acerca de esta y la humanidad, han sucumbido en el subdesarrollo moral y espiritual más vergonzoso como antes lo hemos visto suceder en Europa (Facismo, Nazismo y Comunismo) y como ahora amenaza con regresar (Género).

    El problema con el viejo continente es que al parecer, confiaron únicamente en el desarrollo material como garantía de éxito futuro, pero descuidaron conservar los valores morales que es la estructura que garantiza el desarrollo permanente.

    Felizmente, los grandes cambios en la historia humana no fueron conquistas sociales ni políticas como usualmente ciertos académicos suelen decir, sino que se han dado en primer término a través del reconocimiento moral en la consciencia colectiva de los individuos, como la dignidad inherente de todo ser humano, la libertad, etc.

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    Nicolás de Cárdenas fue inoculado por el virus del periodismo de día, en el colegio, donde cada mañana leía en su puerta que “la verdad os hará libres”. Y de noche, devorando los tebeos de Tintín. Ha arribado en su periplo profesional a puertos periodísticos de papel, internet, televisión así como a asociaciones cívicas. Aspira a morir diciendo: "He combatido bien mi combate, he corrido hasta la meta, he mantenido la fe".