Dice la Ley de Infancia que el llamado síndrome de alienación parental no está probado científicamente y que por tanto no es invocable en un juicio de custodia.
Sin embargo, la manipulación de un progenitor a su hijo, existe. Y el fenómeno debe de tener un nombre. Por eso algunos ya le preguntan a Irene Montero qué nombre debe de tener el fenómeno:
Algunas personas creen que La Sexta da información.
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Suscríbete ahoraLa polémica surge a cuenta de la llamada «violencia vicaria», la última vuelta de tuerca del feminismo político, cultural y social. Se trataría del fenómeno en el que el padre causa violencia sobre la madre en lo que más quiere: sus hijos. ¿No es lo mismo que la alienación parental? ¡No! En este caso el padre es el culpable; en el caso de alienación parental, casi siempre la culpable es la madre.
Pero para la izquierda feminista, esta asimetría anti-igualitaria no tiene relevancia:
Y por cierto, en relación al indulto de Juana Rivas, el juez informa de manera contraria porque no la considera merecedora de la gracia. En primer lugar porque no hay arrepentimiento. En segundo, porque afirma que lo volvería a hacer (igual que los del 1 de octubre) Y en tercer lugar, más relevante todavía, porque el indulto lanzaría un mensaje de que su actuación criminal es digna de elogio y produciría efecto imitación.
De nuevo, está por ver si se respeta la independencia del poder judicial o no…