Asia Bibi se ha convertido en uno de los principales símbolos de los cristianos perseguidos. Lleva siete años encarcelada y condenada a muerte por supuestamente haber blasfemado contra Mahoma. Pese a las injusticias y al sufrimiento, esta humilde católica paquistaní se ha mantenido fiel y espera que las presiones internacionales puedan ayudarla a salir de prisión. Mientras tanto, espera apoyándose en una de las pocas cosas que la queda: su fe.
Durante la visita que le hicieron sus familiares este 25 de diciembre Asia Bibi les dijo que “Navidad es la fiesta de la misericordia de Dios. Yo perdono a mis perseguidores, a todos los que me acusaron falsamente, y espero su perdón”.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
Suscríbete a Actuall y así no caerás nunca en la tentación.
Suscríbete ahoraEstas palabras, según recoge Vatican Insider, dejaron muy impresionados a su marido e hijos. El momento en el que la familia pudo felicitarse la Navidad estuvo lleno de emoción. “Jesús hizo este día feliz para mí y escuchó mis oraciones. Estoy emocionada y llena de alegría al reunirme hoy con mi familia y festejar la Navidad con vosotros”, les dijo.
Además, añadió que no alberga odio en su interior por lo que dijo: “Rezo para que el santo profeta Mahoma dé sabiduría a sus seguidores, para seguir construyendo la paz en el mundo. Rezo para que Jesucristo conceda la paz al mundo entero”.