
Cuatro años. Casi 1.500 días encerrado en casa, privado de libertad, por una arbitrariedad del régimen totalitario chino, cuyos postulados materialistas no pueden tolerar que un obispo católico se declare fiel al Papa.
Así es la vida del obispo auxiliar de Shangai, Ma Daqin, desde el 8 de julio de 2012, cuando fue condenado a rresto domiciliario apenas 24 horas después de que, arropado por la presencia de 1.200 fieles, renunciara a sus cargos en la Iglesia Patriótica China y expresara públicamente su fidelidad al Papa de Roma.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
Suscríbete a Actuall y así no caerás nunca en la tentación.
Suscríbete ahoraCon todo, Daqin no ha corrido la peor de las suertes posibles. No son pocos los casos de juicios sumarísimos, detenciones, torturas y asesinatos que el régimen comunista chino perpetra contra la libertad religiosa.
Aunque el férreo control de la dictadura dificulta la salida de informaicón, al cabo trascienden casos como los del obispo Shi Enxiang, muerto en una prisión en 2015 a los 94 años de edad. O el de monseñor Juan Han Dingxian, de quien las autoridades chinas sólo dieron cuenta de su muerte en 2007, despuñés de 20 años de prisión.
Desde que se conoció el caso, tanto la asociación Enraizados como el Observatorio para la Libertad Religiosa y de Conciencia han llevado a cabo varias actividades, como la recogida de apoyos a un manifiesto que reclama la puesta en libertad del prelado.