En pleno siglo XXI la mayoría de las sociedades presuponen que viven bajo la libertad religiosa y de conciencia, pero no siempre es así.

Países como Irán, China, Francia, Canadá o EEUU han enviado a prisión a gente que no ha cometido ningún crimen, sino que simplemente se ha negado a realizar un acto que consideraban que iba contra sus creencias, como Kim Davis, la última víctima por objeción de conciencia.

Algunas personas creen que La Sexta da información.

Suscríbete a Actuall y así no caerás nunca en la tentación.

Suscríbete ahora

Kim Davis (EEUU), a la cárcel por defender el matrimonio

Fue la primera norteamericana en entrar en prisión por oponerse a firmar licencias de matrimonio a parejas homosexuales y la última víctima de una larga lista de objetores de conciencia que han sufrido el mismo castigo.

Davis, convertida en todo un símbolo para los defensores del matrimonio entre hombre y mujer en EEUU, pasó cinco días entre rejas porque según el juez una multa no la haría cambiar de opinión. Nada más salir de la cárcel, Davis dijo que se mantendría firme y seguiría sin firmar permisos para bodas gays.

Familia Martens (Alemania), por negarse a que sus hijos recibieran clases de ideología de género

Eugen y Luise Martens, al igual que otros 53 alemanes, terminaron en prisión por negarse a pagar la multa que el Estado impone a los padres cuando un nino falta a clase. El problema radica en que sus hijos se saltaron la clase de educación sexual, en la que les decían que cada cual podía elegir libremente su sexo o comportamiento sexual.

De ahí que los padres reclamaran su libertad para educar a sus hijos según sus propios valores y se negasen a pagar una multa que consideraban injusta. Pero esta actitud ha llevado a 53 padres y madres a pasar entre 20 y 40 días en prisión, mientras que otros tantos ninos faltaban a clase de Matemáticas o Lengua sin ninguna consecuencia.

Mary Wagner (Canadá), por rezar ante clínicas abortistas

Mary Wagner salió de la cárcel el pasado 25 de julio, pero en los últimos 20 años no ha parado de entrar y salir de prisión por protestar frente a clínicas abortistas.

Wagner fue condenada a 10 meses de prisión (aunque sólo cumplió siete) por violar el espacio de protección que una clínica abortista había fijado y ponerse a rezar y ofrecer una alternativa a las madres que iban a abortar.

Linda Gibbons (Canadá), por manifestarse ante abortorios

Canadiense como Wagner, y activista provida como su compatriota, Gibbons salió de la cárcel el 15 de mayo de 2015, aunque volvió a ella el pasado 2 de septiembre, por pasear frente a la clínica abortista Morgentaler con un cartel de un nino de diez meses con la frase: «¿Por qué mamá, cuándo tengo tanto amor que darte?»

Sabrina Hout (Francia), musulmana, por no firmar partidas de matrimonio homosexual

Es francesa, musulmana y de izquierdas, pero Hout, auxiliar de clínica y concejal del ayuntamiento de Marsella, se niega a firmar partidas de boda entre personas homosexuales.

Una pareja de lesbianas la denunció el año pasado por negarse a casarlas, y en 2015 un tribunal francés la condenó a tres meses de cárcel y 1.500 euros de multa.

Óscar Elías Biscet González (Cuba), por desafiar las leyes abortistas de Castro

Médico cubano y provida, creador de Fundacion Lawton por los Derechos Humanos. Activista, en 1998 le envió al dictador Fidel Castro su estudio «Rivanol: Un método para destruir la vida», sobre el peligro de los métodos abortivos en la isla.

Al año siguiente fue condenado a tres años de prisión y Amnistía Internacional le calificó como preso de conciencia. Salió en 2002 y un mes después fue condenado de nuevo a 25 años de prisión por ser considerado una amenaza para el estado. Salió en 2011.

Monseñor Su Zhimin y Monseñor Ma Daqin (China), por ser católicos

Arrestado hace 18 años, en 1996, por negarse a formar parte de las filas de la Asociación Patriótica Católica China, la formación controlada por el estado comunista, el obispo de Baoding continúa en prisión bajo la acusación de contrarrevolucionario. En la actualidad tiene 82 años y a pesar de las muchas amnistías del Gobierno chino, Su Zhimin permanece en la dura cárcel china por ser católico y fiel a Roma.

Monseñor Ma Daqin es otra de las víctimas de la falta de libertad religiosa china. Lleva en la cárcel tres años por permanecer fiel a la Iglesia católica negándose a someterse a la iglesia patriótica china. Saeed Abedini (Irán), por convertirse del islam al cristianismo. En el año 2.000, Saeed, un americano iraní, dejó el islamismo y se convirtió al cristianismo, lo que a la postre le llevó a prisión.

En 2009 fue detenido y obligado a firmar un documento en el que se comprometía a cesar toda actividad cristiana en Irán, lo que no evitó que en 2012 fuese arrestado de nuevo y condenado a ocho años de prisión por conducir a jovenes iraníes fuera del islam.

Troy Newman (Australia) por querer dar conferencias sobre el aborto

Troy Newman, líder de ‘Operación rescate’, un grupo antiabortista norteamericano, fue arrestado el pasado 1 de octubre en Australia cuando intentaba entrar en el país para dar una serie de conferencias sobre el aborto.

Justo antes de viajar a Australia, los oficiales de inmigración le cancelaron el visado a Newman tras las alertas lanzadas por políticos australianos de que la visita del líder antiabortista podía generar violencia en contra los proelección.

A pesar de no tener visado, Newman consiguió coger un avion hacia su destino, pero del aeropuerto fue enviado a la cárcel, donde estuvo dos días antes de ser deportado.

Comentarios

Comentarios