Un nuevo documental que se ha estrenado este jueves, está arrojando luz sobre la verdad en la elección entre la adopción y el aborto. Bajo el título I Lived on Parker Avenue, el film presenta el encuentro entre David Scotton, de 19 años, y sus padres biológicos, Melissa Coles y Brian Nicholas.
La película muestra el viaje que hace David para conocer a sus padres y recuerda la decisión de sus padres biológicos el día que salieron de un abortorio y decidieron finalmente tenerle y darle en adopción, según ha informado Live Action News.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
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Suscríbete ahoraCuando Melissa descubrió que estaba embarazada tenía miedo y no se lo contó a su familia, pero también estaba entusiasmada con la idea de convertirse en madre. Sin embargo, ella y Nicholas sintieron que no estaban preparados para criar a un niño en ese momento y decidieron recurrir al aborto. Pero cuando entraron en el abortorio para la cita, ella escuchó una frase que cambiaría la vida de todos.
Algunos empleados del abortorio colocaron unos cascos de radio sobre las orejas de Melissa para que no escuchase todo lo que decían los provida
A su llegada al centro, recuerda que había defensores del derecho a la vida en la acera. El abortorio envió a sus trabajadores a arrojarle una manta sobre la cabeza y, mientras caminaba hacia la puerta, colocaron unos cascos de radio sobre sus orejas para que no escuchase todo lo que decían los provida.
«Pero mientras caminaba, a través de toda la confusión y todo el ruido», dijo Melissa, «recuerdo, a una señora diciendo: ‘Ese bebé tiene 10 dedos y 10 dedos y vas a matarlo'».
Melissa y Brian continuaron en el abortorio, pero cuando vio al abortista aparecer en la habitación, algo le indicó que no podía continuar con el aborto. El abortista la miró, se quitó los guantes y se fue. Ella salió del edificio con su bebé todavía a salvo dentro de su vientre, tras haber tomado una gran decisión.
Una decisión difícil
Darle en adopción fue una elección difícil pero finalmente decidió que era lo mejor para él, aunque le causara dolor. Durante 19 años se preguntó si su hijo la odiaría por elegir la adopción o por casi elegir el aborto.
David creció con sus padres adoptivos, Jimmy y Susan Scotton. Susan había perdido dos hijos, uno a las pocas semanas de su nacimiento y el otro cuando solo tenía dos años. Ambos habían muerto por la misma condición genética.
David agradeció el amor y gratitud a sus padres biológicos y les aseguró que no les deseaba nada malo
Ella estaba encantada de adoptar un nuevo bebé. David siempre supo que fue adoptado y cuando Melissa se puso en contacto con la agencia de adopción para informarle que estaba interesada en recibir datos sobre la vida de su hijo biológico, se iniciaron los trámites para que la madre y el padre biológico se reuniesen con su hijo.
David agradeció el amor y gratitud a sus padres biológicos y les aseguró que no les deseaba nada malo. Además, valoró positivamente la decisión de Melissa y Brian de salir de abortorio y optar por la vida, y sus padres adoptivos también compartieron su gratitud.
Sus padres biológicos pudieron dejar atrás años de culpabilidad preguntándose qué pensaba su hijo sobre ellos, especialmente porque sabía que habían concertado una cita para abortarlo.
«Creo que solo quería, primero, dar gracias por la decisión que tomaron hace 19 años», dijo David cuando conoció a Coles. Coles se sintió aliviada, diciendo que se había sentido tan culpable, pero Scotton le aseguró que nunca estaba enojado con ella. Solo se preguntaba si sus padres biológicos pensaban en él.
David no solo se reunió con sus padres biológicos, sino que ahora también sabe que tiene una hermana y una hermanastra.
Hoy, entiende que es uno de los afortunados, uno de los niños que escapó de las poderosas garras de la industria del aborto. Sabe que tiene una misión en la vida gracias a su madre: difundir la verdad sobre lo bella que es la adopción frente al aborto.
