
La plataforma One of Us lanzó en el año 2012 una Iniciativa Ciudadana Europea en defensa de la dignidad de la vida humana desde su concepción, que concitó el apoyo de más de dos millones de ciudadanos de la Unión.
La iniciativa comandada por el español Jaime Mayor Oreja supuso, además, la primera gran maniobra conjunta de los más importantes grupos provida y profamilia de la Unión Europea, que creó una red de trabajo conjunto que se mantiene hasta ahora y que, recientemente se ha decidido a transformar la actual federación en una plataforma cultural que dé la batalla en defensa de la dignidad humana la familia y las libertades básicas.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
Suscríbete a Actuall y así no caerás nunca en la tentación.
Suscríbete ahoraPese a la masiva petición, la Comisión Europea desestimó de forma poca motivada la puesta en marcha del mecanismo legal para que se legislara sobre la materia. La forma en que la Comisión despachó el asunto fue tan poco fundamentada que el Centro Europeo para la Ley y la Justicia que dirige Gregor Puppink, emprendiera las acciones legales oportunas sobre la cuestión.
Esta semana, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea ha emitido un fallo que, pese a no restituir la posibilidad de que se debata el contenido de la Iniciativa Ciudadana Europea impulsada por One of Us, sienta un buen precedente, de tal manera que la discrecionalidad de la Comisión sobre este instrumento queda limitado.

Tal y como explica el Centro Europeo para la Ley y la Justicia, el tribunal ha dado la razón a One of Us al reconocer que «el acto de no presentar la negativa de la Comisión Europea a la revisión judicial socava el logro del objetivo [alentar la participación de los ciudadanos en la vida democrática y hacer que la Unión sea más accesible] debido a que el riesgo de arbitrariedad por parte de la Comisión puede desalentar cualquier uso del mecanismo» de participación legislativa ciudadana.
De esta manera, el fallo del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, «constituye una victoria institucional» para One of Us, si bien una derrota desde el punto de vista de la defensa de los valores éticos, dado que se refuerza el mecanismo de la Iniciativa Ciudadana Europea.
En definitiva, una derrota con matices, que pueden ser muy valiosos de cara al futuro.