Durante años Planned Parenthood ha tratado de limpiar su imagen afirmando que, de todos los servicios que ofrecen en sus centros, sólo un 3 por ciento está relacionado con el aborto. Sin embargo, un vídeo publicado por Life Action utiliza la propia documentación que ofrece el gigante abortista para desmontar sus argumentos.
Según su informe anual, en el ejercicio de 2014-2015 esta multinacional ha atendido a unas 2,5 millones de personas, de las que especifica que no todas son mujeres, y ha practicado 323.999 abortos. Esto significa 887 abortos al día, 37 en cada hora. Estas cifran indican que Planned Parenthood realiza un aborto cada 97 segundos.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
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Suscríbete ahoraEn el documento se detalla que una cifra muy importante de sus servicios está destinada a los métodos anticonceptivos, a los que casi tres millones de personas han tenido acceso.
En cambio, señalan que se han realizado más de un millón de test de embarazos de los que sólo 17.419 han solicitado los servicios prenatales.
Planned Parenthood resta importancia al aborto, afirmando falsamente que sólo representa el 3 por ciento de su negocio
La presidenta de Life Action, Lila Rose, afirma que Planned Parenthood «resta importancia al aborto, afirmando falsamente que sólo representa el 3 por ciento de su negocio e intenta justificar que los 500 millones de dólares que recibe de los contribuyentes van destinados a tratamientos preventivos contra el cáncer».
Rose añade que «Planned Parenthood no realiza una sola mamografía, y detecta menos del dos por ciento de los casos de cáncer de todas las mujeres en Estados Unidos. Sin embargo, lleva a cabo más del 30 por ciento de los abortos de Estados Unidos».
El vídeo señala que estos otros servicios que oferta la multinacional abortista sirven para encubrir la verdadera razón de ser de Planned Parenthood, hacer abortos, es decir acabar con vidas en el vientre materno.
La presidenta de Life Action señala que están tan centrados en los abortos que sólo uno de cada 160 ninos es entregado en adopción.
«Si una mujer con un embarazo no deseado acude a alguno de estos centros, ese nino tiene un 160 por ciento de probabilidades de acabar siendo envenenado o desmembrado» afirma Lila Rose, de Life Action
«Si una mujer con un embarazo no deseado acude a alguno de estos centros, ese nino tiene un 160 por ciento de probabilidades de acabar siendo envenenado o desmembrado en lugar de ser entregado en adopción a una familia», sostiene Rose.
Pero es que además, al gigante abortista no le basta con propiciar cientos de miles de abortos al año o traficar con los órganos de los bebés abortados, sino que presenta en su informe un nuevo programa para diversificar su negocio: tratamientos hormonales para que las personas puedan cambiar su sexo biológico.
Planned Parenthood, apoyado por los demócratas
Una manera de asegurarse la financiación de los contribuyentes es ofrecer su apoyo a uno de los candidatos a la Casa Blanca, en este caso Hillary Clinton, gran amiga de la presidenta de las clínicas, Cecile Richars.
El vínculo entre ellas ya era muy estrecho, pero quedó patente cuando Planned Parenthood decidió donar 20 millones de dólares a la campaña de la candidata demócrata.
Además, el actual presidente de Estados Unidos, Barack Obama, también ha mostrado su apoyo a la multinacional al vetar el proyecto de ley aprobado en la Cámara de Representantes para retirar los fondos federales a la organización.
Obama justificó su veto dando su apoyo a Planned Parenthood y a la labor que considera que realiza en favor de «los derechos y la salud de las mujeres».
Tanto él como Hillary Clinton se han reafirmado en sus posiciones abortistas e incluso la Justicia decidió investigar a David Delaiden por la difusión de once vídeos grabados con cámara oculta que demostraban la venta ilegal de partes de bebés abortados.
El gran jurado en Texas presentó cargos criminales contra él pidiendo hasta 20 años de prisión. Finalmente, este héroe provida ha conseguido que la Fiscalía desestime todos los cargos que se le imputaban.