Partido Popular: ‘game over’

    Ya ha llegado la sentencia del caso Gürtel. ¿Y ahora qué? Apenas 24 horas después se abre un abanico de posibilidades pero todo es una incógnita. El PSOE está pensando si presentar una moción de censura para que Ciudadanos se retrate, mientras Podemos ha perdido el impulso por el chalet de la pareja de líderes.

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    El presidente del gobierno Mariano Rajoy, no sabe cuánto tiempo le queda. / EFE
    El presidente del gobierno Mariano Rajoy, no sabe cuánto tiempo le queda. / EFE

    La sentencia de la Audiencia Nacional sobre Gürtel es el epitafio del PP y de su presidente. Concluye que el PP se lucró con la trama y confirma que gozó de caja B desde 1989. Además, concluye que el testimonio de Mariano Rajoy carece de “verosimilitud”. Es decir, ha perdido la credibilidad, el principal activo de todo ser humano en general y del político en particular. A partir de hoy es tan zombie como Pablo Iglesias.

    ¿Y ahora qué? Pedro Sánchez se apresura a presentar su moción de censura con él mismo como candidato alternativo. Podemos dice que apoyará. Una buena muestra de cómo el chaletazo ha dejado a los morados sin iniciativa política. Aún así, no suman los 176 requeridos. Dice Bono que con Bildu y los separatistas “no iría ni a misa”. Tampoco Sánchez. El objetivo es otro: retratar a Ciudadanos.

    Algunas personas creen que La Sexta da información.

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    ¿Qué harán los naranjitos?, ¿en qué consistirá el «antes y después» de Rivera? Como todo en la formación naranja, su posición es una incógnita y puede cambiar en menos de 24 horas. Es difícil -por no decir imposible- que apoye la propuesta de Sánchez como presidente. Pero es más factible que exija a los populares un recambio de jinete.

    El descrédito ahora es tal que ni una insospechada dureza antiseparatista podría levantar el entusiasmo popular

    ¿Y luego? Probablemente la moción de censura fracase y aparentemente todo siga igual. Pero el gallego sabrá que está tocado. Si Rivera negó el saludo a Montoro a pesar de apoyar los presupuestos, la relación a partir de ahora será polar. El descrédito ahora es tal que ni una insospechada dureza antiseparatista podría levantar el entusiasmo popular.

    Mariano sabe que lo que le queda no es gobernar, sino agonizar. Y sabe también que lo que espera son reproches en forma de urna. Si fuera un político quizás encontraría un conejo en su chistera. Pero es un registrador de la propiedad. Anota y da fe. No le gustan los líos… Así que mi apuesta es que todo se precipitará. No creo que aguante esta agonía dos años. Mariano es un señor «que se viste por los pies»…

    Así que probablemente antes del turrón dé un paso a un lado para dejar paso a un renovador. Hará coincidir las generales con las municipales y europeas. Tres por el precio de uno. Y el que venga atrás, que apague la luz…

    El anzuelo del pescador

    Podemos, desmovilizado. Menos de un centenar de personas logró reunir este jueves en la calle Génova. El ‘chaletazo’ les tiene anestesiados.

    Trump cancela. Una vez que Kim Jong Un destruye su arsenal nuclear, Trump cancela su cita y amenaza con la intervención militar. Es el modelo negociador del ‘killer’.

    ¿Dónde está Montoro? El ministro dijo que ni un céntimo público financió el referéndum del 1-O. Ahora sabemos que el dinero llegó desviado de los fondos de Cooperación. El 155 económico tenía sus huecos. Y Montoro sin abuelas…

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    Soy economista de profesión y periodista de vocación. Como decía José Ignacio Rivero, director del Diario de la Marina, decano de la prensa de Cuba (otros tiempos), "el periodismo es en lo externo una profesión y en lo interno un sacerdocio". Colaboro en diversos medios y soy editor de campañas de CitizenGO.