El presidente rumano, Klaus Iohannis, rechazó este pasado martes la candidatura de la musulmana Sevil Shhaideh para primer ministro, sin dar muchas explicaciones. Esto ha provocado la reacción contraria de los socialdemócratas, ganadores de las últimas elecciones parlamentarias.
«Medité con cuidado los argumentos a favor y en contra y decidí no aceptar esta propuesta», dijo Iohannis, que sostiene que los dos miembros de la coalición deben ahora nombrar a otra persona.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
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Suscríbete ahoraShhaideh fue presentada para el cargo por el Partido Socialdemócrata (PSD), que fue el más votado el pasado 11 de diciembre junto a su socio ALDE, un bloque liberal. Shhaideh, de etnia tártara, habría sido la primera mujer y primer musulmán en ocupar la presidencia de Rumanía.
El líder del PSD, Liviu Dragnea, y el líder de la ALDE, Călin Popescu-Tăriceanu, han acusado a Iohanis de empujar a Rumania hacia una crisis política. La mayoría parlamentaria podría inhabilitar al presidente por no respetar la constitución, ya que el presidente tiene que nombrar a un primer ministro de las filas de la mayoría parlamentaria.
Asimismo, Dragnea afirma que Iohannis no tenía ninguna razón para rechazar a Shhaideh, quien anteriormente había servido como ministra de Desarrollo Regional. Las dos partes decidirán este miércoles por la noche si iniciar la suspensión del presidente. «Si después del análisis llegamos a la conclusión que es bueno que el país suspenda al presidente, no lo dudaré», dijo. «En mi opinión, el presidente quiere una suspensión porque probablemente piensa, equivocadamente, que puede reinventarse a sí mismo. Tenemos que pensar muy cuidadosamente si lanzamos al país a esta crisis política».
